Angela Davis

Galería de agentes del cambio para ¡Printing the Revolution! The Rise and Impact of Chicano Graphics, 1965 to Now

El Grabado

A screenprint of a portrait of a woman

Rupert García, ¡LIBERTAD PARA LOS PRISONEROS POLITICAS!1971, screenprint on paper, Smithsonian American Art Museum, Gift of the Margaret Terrazas Santos Collection, 2019.52.2, © 1971, Rupert García

Rupert García
nació en French Camp (California) 1941

¡LIBERTAD PARA LOS PRISONEROS POLITICAS!
1971
serigrafía sobre papel
Donación de colección de Margaret Terrazas Santos, 2019.52.2

García creó varios carteles exigiendo la liberación de la académica y activista política Angela Davis tras haber sido encarcelada y acusada de varios delitos, entre otros el de conspiración para cometer un asesinato. En lo que iba a convertirse en su enfoque característico al arte del retrato, García acerca el rostro del sujeto y aplica el color de manera abstracta. Presenta de manera prominente la icónica cabellera afro de Davis, que la convirtió en un símbolo inconfundible del movimiento del Black Power (Poder Negro). Para comunicar la solidaridad de los chicanos con Davis y su defensa de la reforma de las cárceles, García agregó “Libertad para los prisoneros políticas!” en español. Su elección de este idioma hizo que su mensaje fuese accesible para la gente de habla hispana.

La Persona

A photograph of a woman standing and lecturing to a crowd

Fotografía cortesía de Colombia GSAPP

Angela Davis
nació en 1944 – Birmingham (Alabama)

“Si uno quiere lograr cambios duraderos, hay que reconocer que los entornos para la justicia social pueden crearse en cualquier parte”.

A lo largo de los últimos 50 años, Angela Davis se ha encontrado al frente del activismo social. En 1969, se convirtió en una personalidad pública cuando fue despedida de su cargo como profesora de filosofía en la Universidad de California (Los Ángeles) debido a sus opiniones políticas. El año siguiente fue detenida y acusada de tres delitos que podían acarrearle la pena de muerte. Mientras estaba en la cárcel esperando el juicio, el grito de guerra “¡Libertad para Angela Davis y todos los prisioneros políticos!” movilizó a los activistas progresistas. En 1972, Davis fue absuelta de todas las acusaciones. Hoy en día, es profesora emérita en la Universidad de California (Santa Cruz), y sigue siendo una reconocida escritora y conferencista, además de defensora de la reforma política.